La ilusión del poder político de las fuerzas armadas en 2019.
“Entiendo
la cuestión militar en un sentido estrecho: remite a la centralidad adquirida
por la amenaza y el efectivo uso de la fuerza, así como el lugar del control
civil y democrático de las fuerzas armadas...” escribe el profesor Juan
Gabriel Tokatlian, vicerrector de la Universidad Di Tella. Agregando que :
“El involucramiento de las fuerzas armadas en asuntos de orden público, su
preponderancia para el mantenimiento y defensa de un determinado gobierno, la
participación de los militares en la vida electoral de un país, su
involucramiento en la violación de los derechos humanos, la militarización del
tratamiento de fenómenos como el negocio de las drogas y las migraciones, y el
recurso al golpismo constituyen manifestaciones concretas de lo que denomino la
cuestión militar”[1] ¿Esas
afirmaciones son objetivas, corresponden a los roles de las fuerzas armadas del
presente en Argentina? ¿Qué mensaje quiere transmitir el autor del artículo?
El
análisis cívico-militar que el académico describe corresponde a los estudios y
debates que hubo en la región en los 80 con la recuperación de la democracia
frente a la caída de los regímenes militares y a nivel internacional con el fin
de la guerra fría. Simultáneamente, las organizaciones de seguridad
internacional y regional determinaron otras doctrinas de empleo de las fuerzas
armadas ante la emergencia de nuevas amenazas multiformes a nivel mundial. La
lucha contra el terrorismo es parte integrante.
El artículo de referencia describe una lista de intervenciones posibles de las fuerzas armadas en la vida
política, social en un régimen democrático, pero no analiza las causas de esa
intervención ni las responsabilidades de los que abren las vías para que ello
ocurra, y sobre todo si actualmente ello es real, posible. Se invierten
obligaciones y sus consecuencias. No visualiza el continuum seguridad-defensa.
¿De
que fuerzas militares en Argentina se refiere o se preocupa el profesor Tokatlian?
cuando:
-
No disponen, desde fines
de los 80, de capacidad de influenciar los sectores de poder,
- Carecen de control o poder
presupuestario hasta de funcionamiento, que ponga en riesgo un desequilibrio regional.
-
No deciden sobre sus
equipamientos y formaciones correspondientes al contexto geoestratégico, de la polemología
e irenelogía,
-
Disponen de una capacidad
de proyección limitada alejada de la protección y defensa de los intereses
vitales de la Nación.
-
La formación militar fue
reducida y/o reemplazada por programas decididos por la autoridad política
-
La modernización de las
fuerzas armadas no está en las prioridades de los gobiernos.
-
Los ascensos a grados superiores
y puestos dependen de la voluntad política y de ONG
-
Pueden encontrarse al
servicio del poder político como fue durante la responsabilidad del General Milani,
- No tienen real poder
político (ni económico o social), no son una amenaza para el orden
constitucional
- Son interpelados o
prejuzgados por toda actividad de inteligencia. Recae la sospecha, deben dar
explicaciones.
- Tienen una escasa
participación en la Política de Defensa y aún menos en la Doctrina de defensa
nacional frente a las nuevas amenazas
-
No tienen justicia
militar por decisión del poder político
-
La capacidad de
proyección es limitada al límite de la incapacidad operacional.
-
No son una amenaza de
proliferación de armamento convencional, balístico, gasto público...
El
Prof. Tokatlian no puede ignorar que en
Europa las Fuerzas armadas patrullan regularmente las calles de las ciudades,
protegiendo sitios sensibles y la seguridad ciudadana, participan a la lucha
contra el terrorismo en el territorio nacional, como también contra el narcotráfico (operaciones marítimas y aeronavales en el Caribe), la explotación clandestina de oro en Guyana, la inmigración clandestina. Hacen parte de
la comunidad de inteligencia. En cada ministerio existe el cargo de alto
responsable de seguridad-defensa. Participan a la industria de la defensa, estudios
estratégicos, investigación y desarrollo, a la política de defensa, existe un código
de justicia militar. Las numerosas operaciones militares en teatro exterior son
casi exclusivamente de lucha contra el terrorismo, detienen e interrogan los
combatientes enemigos, realizan tareas cívicas con la populación local. Los
militares tienen centros de estudios de alto nivel en temas de defensa para dirigentes
de empresas, diplomáticos, magistrados, académicos. Hay un control democrático de
las fuerzas armadas, no son ni un problema ni enemigas del Estado, de la Nación
o de la democracia. Las ONG no intervienen en la gestión du personal militar, ni
en las decisiones propias de la defensa nacional.
Por
otra parte, el vicerrector de la Universidad Di Tella, analiza amenazas
potenciales cuyos autores serian las fuerzas militares, pero no orienta sus reflexiones
sobre los motivos que llevarían a la posible situación de lo mencionado en su artículo.
Por ejemplo:
-
El porqué de las eventuales
intervenciones no convencionales de militares en la alta política, en un régimen
democrático.
-
Los graves problemas en
el mundo de la política, los hombres políticos y el ejercicio del poder:
corrupción, abuso de poder, politización de la justicia e institucionales
pilares de la Nación, enriquecimientos ilícitos, inseguridad ciudadana,
inseguridad jurídica, que generan la búsqueda de la sociedad de instituciones representando
la seguridad y protección.
-
Porque los jefes de estados llaman o requieren
subrepticiamente de la legitimidad de las FFAA para gobernar, no es por la
influencia de estos en la política o en las tomas de decisiones en las política públicas. Las presentan como garantes de las instituciones, del orden
constitucional que podrán asegurar la continuidad del Estado en casos extremos.
-
El gobierno y sus
militantes políticos confunden el control democrático con el control político, ideológico,
intentando en algunos casos de transfórmalas en fuerzas armadas de un régimen político
y no de la Nación.
-
La actividad permanente de
acciones negativas contra las fuerzas armadas juzgando a todos sus miembros por
un pasado incierto. Diversos sectores buscan una reducción de las fuerzas
militares, de sus presupuestos, equipamientos, misiones, que sin manifestarlo buscan
su desaparición.
-
Como llamaría un “gobierno
civil” pero dependiente a 100% por los militares como en Cuba, Venezuela,
Nicaragua, China, Irán....o si la estructura militare (defensa-seguridad,
inteligencia) le quita apoyo al poder político y al partido político. Porque en
realidad en esos países los militares gobiernan por procuración de manera no democrática.
El
profesor Tokatlian sobredimensiona el poder político de las FFAA y realiza un
juicio de intención de sus miembros, en particular en Argentina porque la
realidad es otra, sabiendo que actualmente ningún país democrático u
organización internacional, reconocerá un gobierno militare producto de un
verdadero golpe de Estado que es una acción suicidaría sin futuro. Las fuerzas armadas son
uno de los pilares fundacionales de la Nación y del Estado de derecho. Tomar el poder politico por la fuerza es ilegal e inconstitucional, contrario al orden internacional. Paris,
15 noviembre 2019, CasppaFrance
[1] Latinoamérica y el
retorno de la cuestión militar https://www.pagina12.com.ar/230424-latinoamerica-y-el-retorno-de-la-cuestion-militar
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