La injerencia del poder ejecutivo en la justicia federal es una conducta permanente en Argentina, en violación al Estado de derecho y a la Constitución nacional. Los jueces federales que negocian sus decisiones según conveniencia del gobierno de turno, sus fallos siempre fueron y son políticos. Ahora son amenazados, atacados, presionados, para modificar condenas por corrupción. Lo que hoy es firme mañana se puede revertir si su supervivencia esta en juego. Así hicieron y lo hacen con los arbitrarios procesos de lesa-humanidad. Los que se oponen a una revisión en nombre de las reivindicaciones de los años 70 o del slogan “no perdonamos, no olvidamos, no nos reconciliamos” promueven el odio, la violencia, el desorden público y por ello deben ser llevados ante la justicia como agente de persecución del Estado corrupto. Casppa France hace un llamado para que sean revisados los procesos, juicios y condenas de esos arbitrarios juicios de lesa-humanidad en nombre de los derechos humanos, del principio intangible de legalidad, convencionalidad, y pactos de obligaciones internacionales imperativa para el Argentina. Cuando la sentencia esta escrita ante que empieza el juicio, no puede ser llamada “justicia”.
En un Estado de derecho :
- No podemos aceptar una justicia que condena sin pruebas,
- No podemos aceptar una justicia que no respecta el debido proceso,
- No podemos
aceptar una justicia que utiliza una política de Estado de “reconstitución de
las memorias” de testigos como única forma de prueba para condenar,
- No podemos aceptar una justicia política que invierte la carga de la
prueba,
- No podemos aceptar una justicia política que utiliza una política de Estado de lucha contra “la impunidad gerontológica” y “biológica”,
- No podemos aceptar una justicia que no respecto el derecho penal nacional, la Constitucion, y las Convenciones internacionales,
- No podemos aceptar una justicia que utiliza como querellante organismos que no tienen autoridad moral en lo DDHH y son organismos del poder,
- No podemos aceptar una justicia que no respecta a la igualdad de las armas de las partes,
- No podemos aceptar juicios de una justicia no independiente,
- No podemos aceptar que se haga justicia con jueces corruptos,
- No podemos aceptar que se haga justicia con jueces parciales,
- No podemos aceptar una justicia que se vea como venganza y no como equitativa,
- No podemos aceptar la retroactividad penal,
- No podemos aceptar la inequidad ante la ley para una categoría de ciudadanos,
- No podemos inventar reglas de derecho que no existen.
En un Estado de derecho, no se puede corregir una injustica cometendio otra injusticia.
Casppa France, 28/02/2021
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